El Barcelona, pese a declarar un pasivo superior a los 400 millones de euros, dispuso repartir u$s 26 millones entre el plantel que el sábado se adjudicó la Champions League. La cifra que recibirán los héroes de Wembley seguramente se duplicará con los aportes de sponsors, benefactores y fanáticos-magnates espontáneos que querrán ser parte de la fiesta, aunque más no sea a través de sus contribuciones económicas. Es tradición.
Según medios españoles, es un hecho que la directiva de la institución «culé» no repartirá los u$s 26 millones en partes iguales entre todos los jugadores; las estrellas del equipo, Lionel Messi, Xavi Hernández y Andrés Iniesta encabezarán la lista de beneficiados con más de u$s 1,6 millón cada uno; llevando a extremos absurdos el cálculo, puede decirse que «la Pulga» y sus dos compañeros ganaron cerca de u$s 18.000 por minuto por su faena del sábado en Wembley.
En el otro extremo están los integrantes del plantel que, por razones tácticas o físicas (es el caso del argentino Gabriel Milito), jugaron poco o nada; ellos recibirían poco menos de u$s 200.000. Un escalón por debajo del «trío dorado» del Barça se ubicaría otro argentino, Javier Mascherano, junto con figuras como el arquero Víctor Valdés y el zaguero Gerard Piqué, cuyo premio especial estaría apenas por debajo de u$s 1 millón.
Un caso especial lo constituye el capitán «histórico» del FC Barcelona, el defensor Carlés Puyol, quien si bien debió dejar su puesto en manos de «Masche», al momento de cobrar recibiría un tratamiento similar a quienes disputaron todos los partidos.
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